viernes, 30 de enero de 2015

La tecnología Big Data plantea un reto a la privacidad personal

El Big Data o tecnología de procesado de millones de datos en tiempo real junto con el "internet de las cosas”, ese fenómeno creciente de conexión de todo con todo mediante sensores y que está disparando el volumen de información disponible, plantean dos ambiciosos retos sociales sobre privacidad personal.
Así quedó de manifiesto en una interesante jornada sobre tratamiento masivo de información organizada en Madrid por la AEPD junto con la Comisión Europea con motivo de la celebración del Día Europeo de Protección de Datos, y a la que asistieron investigadores, expertos y autoridades europeas competentes en la materia.
La capacidad predictiva de las nuevas tecnologías para el análisis en tiempo real de toda esta ingente cantidad de datos, con unas previsiones que apuntan a 50.000 millones de aparatos conectados en 2020 de muy fácil acceso para cualquiera, plantea muchas ventajas económicas y de bienestar social, pero asimismo grandes y serios riesgos para la privacidad personal.
El vaticinio de los expertos
De este modo, según los expertos, podría suceder por ejemplo que las aseguradoras, al disponer de datos anticipados sobre enfermedades susceptibles de ser desarrolladas por ciertas personas, les animara a subirles las primas o incluso rechazarlas aun estando sanas. Y sería posible, además, estigmatizar a personas libres de delito bajo el argumento de que el análisis de sus datos con variables de comportamiento, estatus o condición social están adelantando que un día cometerá alguno.
En la enseñanza se podría excluir a ciertos niños, incluso, antes de formar parte siquiera del sistema educativo si las predicciones a partir del análisis de información masiva desvelaran que su futuro académico se vislumbra poco halagüeño.
La jornada fue inaugurada por el director de la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD), José Luis Rodríguez Álvarez, quien destacó el reto para la privacidad que plantean estos fenómenos emergentes como el Big Data y el "internet de las cosas”. Parte de su intervención estuvo centrada en el "gravísimo” atentado recientemente perpetrado contra un semanario francés para advertir de que no estaría justificado que los estados se extralimitaran ahora en el control de datos personales de los ciudadanos bajo el argumento de la seguridad nacional.
Añadió que el concepto de privacidad está cambiando tan rápido como la tecnología en un contexto de modernidad.

lunes, 26 de enero de 2015

Sistemas de información

En el estudio realizado por los investigadores Rodríguez y Daureo, publicado el año 2003 con el título “Sistemas de información: Aspectos técnicos y legales”, los sistemas de información y las telecomunicaciones surgieron como dos culturas separadas con filosofías totalmente diferentes: Por un lado los sistemas de información surgieron ligados a la aparición y desarrollo de las computadoras, se hizo una incorporación rápida de los nuevos cambios tecnológicos que se iban produciendo, contaba con un alto porcentaje de improvisación en la búsqueda de soluciones y el desarrollo de soluciones se producía a modo de islas separadas y sin mucha relación entre sí. Por su parte las telecomunicaciones surgieron ligadas a la aparición y desarrollo de las redes telefónicas, se hizo una incorporación lenta y progresiva de los avances tecnológicos además de que su perspectiva era la de una red global. A lo largo de su evolución histórica se han producido contribuciones mutuas de cada campo al desarrollo del otro, en realidad, los avances experimentados en los sistemas de información están estrechamente relacionados con los avances realizados en el campo de las telecomunicaciones. Esta es la razón por la que se utiliza el término tecnologías de la información y las comunicaciones para definir un conjunto de tecnologías complejas que agrupan aspectos como sistemas de información, ingeniería del software, telecomunicaciones, automatización, etc. Aunque cada una de estas disciplinas tiene su propia dinámica interna, la interrelación existente entre ellas hace necesario considerarlas de una forma conjunta, como un sistema.

Saroka, en el libro publicado el año 2002 titulado “Sistemas de información en la era digital”, menciona que un sistema de información es un conjunto de recursos humanos, materiales, financieros, tecnológicos, normativos y metodológicos, organizado para brindar, a quienes operan y a quienes adoptan decisiones en una organización, la información que requieren para desarrollar sus respectivas funciones. Un sistema de información no requiere necesariamente el uso de la tecnología de computación. Han existido sistemas de información antes de que se crearan las computadoras. Por otra parte, aun en los sistemas de información más modernos y con más amplio uso de dispositivos de computación, se realizan muchas operaciones y se cumplen muchas funciones en las que la tecnología informática no interviene o lo hace sólo en una limitada función de apoyo. Sin embargo, la computación y las comunicaciones han potenciado de manera bastante extraordinaria la capacidad, velocidad y exactitud del tratamiento de los datos, por lo que resulta prácticamente inconcebible el diseño de un sistema de información eficiente sin el empleo de tales tecnologías.

Según los investigadores Keneth y Julie Kendall, en el libro publicado el año 2005 con el título “Análisis y diseño de sistemas”, mencionan que los sistemas de información se desarrollan con diversos propósitos, según las necesidades de la empresa. Los sistemas de procesamiento de transacciones funcionan al nivel operativo de una organización, los sistemas de automatización de la oficina y los sistemas de trabajo del conocimiento apoyan el trabajo al nivel del conocimiento. Los sistemas de información gerencial y los sistemas de apoyo a la toma de decisiones se encuentran entre los sistemas de alto nivel. Los sistemas expertos aplican el conocimiento de los encargados de la toma de decisiones para solucionar problemas estructurados específicos. Los sistemas de apoyo a ejecutivos se encuentran en el nivel estratégico de la administración. Los sistemas de apoyo a la toma de decisiones en grupo y los sistemas de trabajo corporativo apoyados por computadora, descritos de manera más general, auxilian la toma de decisiones semi-estructuradas o no estructuradas a nivel de grupo.

Los investigadores Kendall, en el libro citado anteriormente, indican que el análisis y diseño de sistemas, tal como lo realizan los analistas de sistemas, tiene el propósito de analizar sistemáticamente la entrada o el flujo de datos, procesar o transformar datos, el almacenamiento de datos y la salida de información en el contexto de una empresa en particular. Más aún, el análisis de sistemas se emplea para analizar, diseñar e implementar mejoras en el funcionamiento de las empresas, a través de sistemas de información computarizados. La instalación de un sistema sin una planeación adecuada conduce a una gran decepción y con frecuencia provoca que el sistema deje de utilizarse. El análisis y diseño de sistemas da forma al análisis y diseño de sistemas de información, un esfuerzo muy valioso que de otra manera podría haberse realizado de una manera fortuita. Se le puede considerar como una serie de procesos sistemáticamente emprendidos con el propósito de mejorar un negocio con ayuda de sistemas de información computarizados. Gran parte del análisis y diseño de sistemas implica trabajar con usuarios actuales y ocasionales de los sistemas de información. Es importante que los usuarios intervengan de alguna manera durante el proyecto para completar con éxito los sistemas de información computarizados. Los analistas de sistemas, cuyos roles en la organización se describen a continuación, constituyen el otro componente esencial en el desarrollo de sistemas de información útiles.

lunes, 19 de enero de 2015

Sistemas de información Guillermo Choque Aspiazu

Guill y sus colegas, en el material docente escrito el año 2011 con el título “Fundamentos de sistemas de información”, mencionan que las continuas innovaciones en las tecnologías de la información y la comunicación desde Internet, la red inalámbrica, los teléfonos móviles 4G o el paradigma de la computación en la nube, el aumento de los servicios en las tecnologías de la información y la comunicación como el comercio electrónico, el comercio móvil o el gobierno electrónico, la nueva generación de los servicios de tecnologías de la información y la comunicación como los blogs o las comunidades virtuales, están transformando el mundo del negocio empresarial en nuevos modelos, procesos y necesidades empresariales. La globalización del comercio, la geo-localización de la producción, las economías de la información y las nuevas estrategias empresariales han potenciado las inversiones de las empresas para ser más competitivas en el mercado actual. Los ejecutivos empresariales entienden la importancia de destinar presupuesto a la adquisición, implantación o actualización de sistemas de información empresariales. Las empresas reclaman herramientas para gestionar y optimizar sus procesos de negocio. En un entorno dinámico donde los cambios se suceden rápidamente, se necesitan sistemas de información que integren en una visión global sus procesos de negocio, incluyendo otras empresas que colaboran y cooperan en la compleja cadena de suministro, y a los diferentes actores que participan en este escenario como los clientes, los socios, los empleados o los proveedores. Existe un amplio catálogo de soluciones que enriquecen los tradicionales sistemas de información empresarial, aportando nuevas funcionalidades con arquitecturas tecnológicas sólidas, las cuales soportan e integran la diversidad de aplicaciones que son diseñadas y comercializadas por los proveedores de sistemas de información empresarial.

El investigador Saroka, en el libro publicado el año 2002 titulado “Sistemas de información en la era digital” establece que la palabra “sistema” tiene un uso sumamente difundido y variado. Por ejemplo, se usa con frecuencia expresiones como “sistema de computación”, “sistema de información”, “sistema político”, “sistema económico”, “sistema ecológico” y muchas otras, más o menos similares. Por lo tanto, resulta conveniente precisar con claridad el concepto general de “sistema”, desvinculado de la finalidad de procesar o suministrar información y de cualquier otro propósito relacionado o no con ella. Vale decir que, antes de considerar los sistemas de información, será muy útil desarrollar una serie de ideas esenciales y concretas asociadas con el concepto general de “sistema”. Por otra parte la teoría general de sistemas se ha desarrollado en el siglo veinte. Hasta avanzado este siglo, la ciencia moderna había sido dominada por el enfoque analítico, es decir, por la reducción de problemas complejos a sus componentes aislables más pequeños. Este enfoque suministró las relaciones causales que los científicos buscaban. Sin embargo, cuando se trataba de fenómenos complejos, el todo resultaba ser más que la simple suma de las propiedades de las partes tomadas por separado. Se comprobó que el comportamiento de los sistemas complejos debe explicarse no sólo en función de sus componentes, sino también en función de todo el conjunto de relaciones existentes entre ellos. Esto constituyó un cambio de metodología. Ludwig von Bertalanffy formalizó y propició esta metodología en el decenio de 1920, mediante la formulación de su Teoría General de los Sistemas a comienzos del decenio de 1930, pero su trabajo principal sobre este tema fue publicado en 1950 e impulsó el desarrollo ulterior de esta teoría.

En la monografía publicada el año 1995 con el título “Ingeniería de sistemas”, Blanchard define un sistema como una combinación de recursos, inicialmente las personas consideradas como recursos humanos, los recursos materiales, equipos, software, instalaciones, datos, y otros, integrados de forma tal que cumplan una función específica en respuesta a una necesidad identificada por un usuario. No sólo incluye los recursos utilizados directamente en el cumplimiento de la misión, esto es, equipo principal, software operativo, usuarios finales, sino también los diferentes elementos del apoyo, como por ejemplo: Equipos de apoyo y prueba, repuestos y requerimientos relacionados de inventario, personal de mantenimiento e instalaciones y otros. Esta es una definición genérica que incluye todo tipo de sistemas. Desde sistemas en los que no existen “recursos software” hasta aquellos otros en los que los recursos software constituyen los elementos fundamentales para conseguir la funcionalidad pretendida. Se denomina recurso software a un programa o conjunto de programas ejecutables que proporcionan algunas de las funciones requeridas por el sistema.