lunes, 26 de mayo de 2014

Agentes de red

Lange y Oshima, en el libro citado en los párrafos precedentes, mencionan que los agentes de red se caracterizan por su capacidad para desplazarse entre los nodos de una red de aplicaciones distribuidas. En el caso de agentes que no son de red, todo el proceso que se desea o necesita realizar se completa en el propio nodo en el que se inició su ejecución, nodo en el que se mantendrá durante todo su tiempo de vida. La solicitud de información a otros nodos se realiza mediante los mecanismos habituales de comunicación como son las llamadas a procedimientos remotos. Los agentes de red, con su capacidad para desplazarse, permitirán aprovechar las capacidades de los distintos nodos por los que se pueden desplazar para mejorar el rendimiento en la obtención del objetivo perseguido. Según Huhns y Singh, en el libro escrito el año 1998 con el título “Lecturas en agentes”, diversos autores propugnan que los agentes de red son una de las últimas etapas en la evolución de los sistemas distribuidos que en un futuro, podrían estar formados únicamente por una red compleja de agentes inteligentes móviles, lo que se considera un multiagente.

Una interesante definición de agente de red es propuesta por Lange y Oshima, en el libro citado, como: Un objeto de software que es capaz de migrar entre los nodos o dominios de una red en un sistema distribuido. Creado en un entorno de ejecución, el agente puede transportar su estado, valores de sus atributos que le sirven para determinar qué hacer cuando se reanuda la ejecución del mismo en el entorno destino, y su código, instrucciones que forman lo que el agente debe ejecutar, a otro contexto en donde reanudará la ejecución. Estos agentes aprovechan los recursos del nodo destino en beneficio del nodo que los inició. También se considera por otros autores que un agente móvil puede entenderse como la unión del código del agente, los estados de ejecución, los datos y el itinerario. Todos estos elementos deben ser portables para migrar y ser ejecutados en distintos nodos.

En palabras de Gutiérrez, en la tesis doctoral escrita el año 2006 bajo el titulo “Definición de un agente inteligente para la intercomunicabilidad automática de sistemas de aprendizaje basados en Internet”, las características de un agente de red reseñadas en los distintos trabajos sobre estos, son las mismas para los agentes en general pero extendidas y con matices respecto a la movilidad de que disponen: (1) Autonomía de movimiento, ya que será un proceso autónomo o semiautónomo, capaz de decidir cuándo, cómo y en qué condiciones migrar desde el nodo de residencia actual a otro. (2) Persistencia en la movilidad, ya que el objeto agente se envía manteniendo su estado, código y datos al nodo destino. (3) Capaz de suspender su ejecución ante una migración y capaz de reanudarla tras la migración en el mismo punto donde se quedó. (4) Comunicativo con el medio, con otros agentes y con el usuario con el que trabaja, a pesar de los cambios. Es decir, es capaz de interactuar con los agentes de un nuevo nodo, con el propio nuevo nodo y con el usuario que ahora puede estar en otro nodo distinto, más alejado. (5) Enfocado a la realización de tareas, bien delegadas por su usuario o bien obtenidas a través del estado del entorno en el que se encuentra. (6) Independiente de la conexión, si esta cae por algún motivo, el agente podrá migrar a otro nodo con conexión si es necesario o esperar a que la conexión se reanude bien permaneciendo activo, bien desactivándose. (7) Ejecutable asíncronamente, mediante su propio hilo de ejecución, independiente del resto de procesos y agentes ejecutados en el mismo nodo. (8) Duplicable, o mejor autoduplicable mediante la creación de un clon de sí mismo, para que le ayude en la tarea ocupando así más recursos del nodo para completar una tarea que puede ser prioritaria.

Gutiérrez menciona en su tesis doctoral que los agentes de red deben: (1) Permitir el cómputo asíncrono y autónomo. Asíncrono por poseer su propio hilo de ejecución que les permite ejecutarse independientemente del resto de procesos del nodo y autónomo por su capacidad para decidir cuándo y cómo actuar según el estado de su entorno. (2) Ser heterogéneos. (3) Propiciar entornos robustos y a prueba de fallos, dada su habilidad para responder a los cambios en su entorno y realizar cambios en su forma de trabajar migrando, esperando o, permaneciendo activos, trabajando aún cuando no hay conexión. (4) Favorecer el procesamiento paralelo. Ya que una tarea compleja, podría ser descompuesta en varias por un agente y encargadas cada una de ellas a otro agente que la realiza, o bien utiliza su hijo para completarla o bien migra a otro nodo donde aprovecha la capacidad del mismo para realizar su tarea. Al final, todas las tareas parciales son reunidas por el agente principal para componer la solución al trabajo. (5) Reducir el tráfico de red. Ya que el uso de agentes permite la solicitud de un cierto servicio y la delegación en el agente de la solicitud que considere oportuna en el nodo de residencia. Sin el uso de agentes, cada servicio del nodo destino requiere una llamada a procedimiento remoto. (6) Mantener comunicación punto a punto. En el paradigma cliente-servidor, el más utilizado en Internet, los servidores no se caracterizan por la comunicación horizontal entre servidores del mismo tipo, que podría resultar muy beneficiosa. En cambio, los agentes son entidades que pueden servir como cliente servidor o bien comunicarse en su mismo nivel con otros agentes. Se menciona también que existen desventajas como son: (1) La falta de seguridad. Los agentes son tan flexibles y se les debe permitir tantas posibilidades que los sistemas sobre los que trabajan están a merced de usuarios mal intencionados. Para solventar este problema se requerirán certificaciones que autentifiquen los agentes para evitar los ataques a los nodos mediante agentes malignos que consuman recursos y se clonen sin más finalidad que la de ocupar recursos. También se requerirán cifrados de datos para los intercambios entre el usuario y sus agentes, entre agentes y entre nodos cuando se deba producir la transmisión de los agentes. (2) Limitaciones de los lenguajes de programación en los que se deberían programar.

lunes, 12 de mayo de 2014

Inteligencia sintética

Según Sternberg, en el artículo publicado en año 2005 con el título “El Modelo WISC de superdotación. Una teoría triárquica de la superdotación intelectual”, la creatividad es la capacidad de pensamiento divergente que favorece la búsqueda de soluciones o alternativas diferentes ante la presentación de un problema. Los sujetos con un alto nivel de creatividad son aquellos que presentan una capacidad de inventiva elevada, ideas nuevas y originales. Desde los planteamientos de la teoría triárquica de la inteligencia de Sternberg, definida en el libro publicado en año 1985 con el título “Más allá del CI”, se considera la creatividad un constructo complejo que no se puede explicar sin apelar a componentes de tipo cognitivo, motivacionales, ambientales y de personalidad que envuelven la vida del individuo. En los primeros trabajos sobre superdotación, se define la superdotación intelectual dentro de su modelo de inteligencia triárquica. Para Sternberg, los estudiantes superdotados suelen combinar con gran maestría y habilidad los procesos de la inteligencia analítica, sintética y práctica, pero lo verdaderamente relevante de la superdotación es el uso que suelen hacer de las habilidades de la perspicacia.

Sternberg, en el libro “Más allá del CI”, define la inteligencia analítica como la capacidad para el pensamiento convergente y requiere el pensamiento crítico para analizar y evaluar pensamientos, ideas y posibles soluciones. Este tipo de habilidad es la clave para el trabajo realmente creativo, porque no todas las ideas son buenas, ya que algunas han de ser valoradas. Las personas creativas utilizan este tipo de pensamiento para considerar las implicaciones que tienen las propuestas de algunas soluciones. Considera que la inteligencia sintética o creativa es la capacidad para enfrentarse a situaciones novedosas y resolverlas. Los superdotados son superiores cuando se enfrentan a situaciones novedosas, suelen aprender y pensar en nuevos sistemas conceptuales que se apoyan en estructuras de conocimiento que el individuo ya posee, siendo las situaciones extraordinarias, y no las rutinas cotidianas, un reto para el sujeto y las que mejor muestran la inteligencia del mismo. La inteligencia práctica sirve para explicar la eficacia del sujeto mediante tres tipos de actuaciones que caracterizan su conducta inteligente en su vida cotidiana: Adaptación ambiental, selección y modificación o transformación del contexto. La inteligencia excepcional supone adaptación intencionada, configuración y selección de los ambientes del mundo real, que son relevantes para la vida del sujeto. Es decir, la inteligencia de un superdotado no puede medirse fuera de su entorno habitual, a menos que lo que se quiera medir sea la capacidad de adaptación de este sujeto a un medio diferente. Así pues, la superioridad de los superdotados radica en el ajuste y equilibrio entre la adaptación, la selección y la configuración del ambiente.

Davidson y Sternberg, en el artículo escrito el año 1984 titulado “El rol de la perspicacia en la superdotación intelectual”, definen el carácter específico que tiene la perspicacia para explicar la maestría con la que los superdotados se enfrentan a la solución de problemas inusuales. Por tanto, los procesos psicológicos básicos de la superdotación cognitiva residen en las habilidades de la perspicacia, que incluyen tres grandes procesos. Estos son: (1) Codificación selectiva. Es la habilidad para separar la información relevante cuando se soluciona un problema novedoso, de la irrelevante. (2) Comparación selectiva. Se refiere a la capacidad para relacionar la información nueva con la previamente almacenada que es relevante para solucionar el problema. (3) Combinación selectiva. Es la habilidad para relacionar la información almacenada selectivamente y compararla con la almacenada en la memoria de trabajo. Exige establecer conexiones de manera novedosa y útil entre informaciones que parecen disonantes. Davidson y Sternberg subrayan que los niños superdotados son muy buenos codificadores para utilizar la información que necesitan para resolver un problema concreto en un momento determinado, son rápidos para darse cuenta de la información que no es necesaria y la ignoran con facilidad; suelen ser también muy habilidosos para realizar las conexiones pertinentes y automatizarlas; suelen disponer de estrategias para escapar de la información superflua e inventan procedimientos que les capacitan para aprender otras estrategias nuevas; los superdotados pueden discernir lo que es importante e invierten el tiempo necesario para planificar globalmente la tarea con el fin de ser rápidos y eficaces en la solución de los problemas o actividades. Hacia el año 1995, Sternberg y Lubart, en el libro titulado “Desafiando a la multitud: Cultivar la creatividad en una cultura de la conformidad”, proponen un nuevo concepto denominado superdotación creativa, y la definen mediante seis recursos: Procesos intelectuales, conocimiento base, estilos intelectuales, rasgos de personalidad, motivación y contexto.

lunes, 5 de mayo de 2014

Inteligencia sintética

Se considera que la creatividad es una de las cualidades esenciales de la vida, de los seres vivos. En palabras de María Molina, en el libro escrito el año 2010 titulado “Teoría y tipos de inteligencia. Lógica, intuición y creatividad”, en relación con la creatividad humana, parece claro que todas las personas son creativas en mayor o menor medida, al igual que pasa con la inteligencia o la belleza. Cuando el lenguaje utiliza este concepto como adjetivo se está refiriendo a una persona que presenta esta cualidad con especial relevancia respecto al resto o al término medio de la población. La creatividad es un subconjunto de la inteligencia, entendiendo ésta como conjunto de funciones relacionales básicas o elementales, asociadas a un alto grado de fiabilidad; es decir, un subconjunto del caso particular de la inteligencia condicional. En sentido estricto, este último requisito es esencial para la inteligencia, si las funciones cerebrales encargadas de efectuar las relaciones lógicas se equivocan a menudo no serían inteligencia, serían otra cosa que Molina denomina intuición o, si se equivocan casi siempre, ausencia de inteligencia. Dicho subconjunto estará formado por aquellas funciones que facilitan la creación, diseño, invención, imaginación, etc. de nuevos conceptos o ideas. La exigencia del requisito de alta fiabilidad para la creatividad es paradójica porque no parece que se pueda aplicar la misma justificación de “gravedad del posible error” que se ha utilizado al establecerlo para la inteligencia. No sólo un error no sería grave en los procesos creativos sino que los fallos se consideran normales. Sin embargo, dado que la creatividad requiere efectuar varias operaciones sucesivas para llegar a existir, si las funciones elementales cometen errores es poco probable que el resultado final pueda ser bueno; es posible encontrarse con creaciones nuevas fruto del azar pero no de la creatividad.

Molina, en el libro citado, menciona que en definitiva, la creatividad estaría formada por funciones complejas o paquetes de funciones básicas de la inteligencia que soportan las capacidades de: (1) Efectuar extrapolaciones y estimaciones del resultado, dadas las relaciones existentes. (2) Comprensión de los límites de los parámetros involucrados en las relaciones y su efecto sobre las mismas. (3) Detectar el cambio de relación provocado por un cambio de los parámetros, dicho de otro modo, implicaciones cualitativas por cambios cuantitativos. (4) Manejo simultáneo de varias dimensiones. (5) Realizar cambios de variable, de escala o de modelo, alterar los nuevos parámetros y volver a la variable, escala o modelo inicial en el punto adecuado a los cambios correspondientes de los parámetros originales. Es decir, los conceptos relativos a los diferentes tipos de aplicaciones definidos en las matemáticas de conjuntos. (6) Funciones relacionadas con el pensamiento estadístico avanzado tales como distinción entre valor medio y valor normal, valor diferente y valor raro. Distinción entre caso particular y valores generales. (7) Cualquier otra que responda al concepto enunciado. Lógicamente, para ser creativo en una materia determinada, no es necesario tener todas las funciones anteriores.

Según Bermejo y sus colegas, en el artículo escrito el año 2010 titulado “Creatividad, inteligencia sintética y alta habilidad”, son diferentes los estudios y trabajos realizados sobre el estudio de la creatividad. El tema se ha tratado desde diferentes perspectivas y enfoques: Psicodinámicos, psicométricos, biográficos y cognitivos, y la forma de enfocarlo difiere según las diferentes perspectivas. A nivel general, la creatividad se entiende como la capacidad para engendrar algo nuevo, ya sea un producto o una técnica, o una forma de enfocar la realidad. En este sentido, las personas creativas tienen la capacidad para pensar en algo nuevo que la gente considera de interés, pero sólo unas pocas personas lo hacen de forma diferente y original. Suelen tener ideas que rompen con las tradicionales y estereotipadas, e incluso con los modos generalizados de pensar y actuar. A pesar de las dificultades en encontrar una definición de la misma, la mayoría de los autores ratifican que la creatividad implica el logro o resultado de un producto original y útil. La inteligencia sintética acoge en su definición a la creatividad como elemento central, a punto tal que esta inteligencia también se conoce con el nombre de “inteligencia creativa”.